lunes, 30 de septiembre de 2013

A veces simplemente...


Simplemente te das cuenta de que has dado demasiado, y explotas, te das cuenta de que no vale la pena porque simplemente no lo valoran, y esta de más pedir disculpas, porque simplemente no las merecen ni se justifican, porque uno también tiene un límite, también se cansa, y deja de ser lo mismo, porque siento que doy mucho y que sinceramente no lo valoras, porque siempre estoy ahí, siempre, y tu estas, no lo niego pero siento que solo estas cuando yo te lo pido porque en realidad lo necesito, no cuando realmente te acuerda de mi, porque siempre son los demás primero no?claro, pero sabes que, a la final soy la que ha estado ahí, siempre, y los demás te fallan, porque lo he visto, pero estás aun así para ellos, y yo que?, entonces 
esto no vale nada? nunca importo realmente para ti? porque eso parece.A veces simplemente es mejor dejarlo pasar, y si de verdad le importas a esa persona, ella vendrá contigo sin necesidad de que vallas a ella de nuevo. 



                                                                                Ahí es cuando se demuestra que si vale la pena seguir.

jueves, 8 de agosto de 2013

No lo entiendo...

Me atrapaste, fue algo en tu personalidad tan poco común lo que me envolvió, siempre tan anti parabólico, sincero, encantador, hijo de puta, tierno, original, no sé cómo lo haces, como aun siendo tan imbécil, infantil, inmaduro, que no le da importancia a lo que sienten los demás, que no piensa más que en sí mismo, me puedes llegar a gustar tanto que no puedo sacarte de mi cabeza, y eso es algo que me hace sentir tan estúpida.  Pero aun así siendo sincera, no lo entiendo, no me entiendo, no sé cómo aun siendo como eres no logro ver algo en ti que no me guste de tal manera que pueda llegar a odiarlo. Aun con tantos defectos no logro ver algo en ti que no me guste.

sábado, 13 de abril de 2013

Ese momento.


Al parecer, para muchas personas es difícil comprender que para algunas cuantas nos es necesario estar solos, y nos produce satisfacción y felicidad el estar en nuestra habitación sin pensar en todo lo que hay fuera. Muchas personas no entienden lo necesario que es para muchos encerrarse en su habitación con los auriculares puestos y la música a todo volumen sin preocuparse por más nada que por escuchar o simplemente darse el lujo de no pensar en los problemas, darse el lujo de liberarse de todo por un instante. Ese momento tan lleno de paz, que por muy poco que lo vean los demás, para nosotros es mucho, y es solo nuestro, es un momento que nos ayuda a reflexionar, a tomar decisiones, a encontrarnos con nosotros mismos de nuevo sin que nada nos interrumpa, pero que a otros solo nos ayuda a mantener nuestros pensamientos en calma. Es un momento que te puede llevar a imaginar una historia en cuestión de minutos, que te libera de todo el estrés, la presión y tristeza, que te llena de alegría; tan solo tú y el tiempo. Un momento que tomamos también para recordar, tanto buenos como malos momentos, para en poco tiempo convertir un día triste en algo bueno, para analizar, un momento en el que hagamos lo que hagamos somos felices por el simple hecho de estar solos con nosotros mismos sin que nada ni nadie nos moleste. 

domingo, 31 de marzo de 2013

Escribir para uno mismo.


Para mí, escribir siempre ha sido, más que una forma de desahogarme, una forma de vaciarme. Desde que recuerdo voy por la vida haciendo anotaciones por doquier. Algunas con más sentido que otras. Otras muchas completamente carentes de él, excepto para mí. Papelitos y hojas sueltos, libretas, tarjetas, documentos de Word, mails, posts, tuits... Todos me resultan una especie de sinónimo. El chiste es tener dónde vaciar eso que me sube desde la boca del estómago y llega hasta mis manos. Podría decir que, para mí, el papel y la pluma son como un pensadero. Si paso largas temporadas sin tocar un teclado o una pluma me entran unas cosquillas extrañas en el cuerpo. Siento que me asfixio de tanto que acumulo. Una urgencia que sólo se calma al ver letras. De ahí que para mí, llevar un diario sea un hecho natural, obligado. Ha habido épocas en las que registro todo detallada y rutinariamente. A diario. Otras en las que sólo hago anotaciones de vez en vez. Cuando entro en crisis o en éxtasis, sobre todo. Lo que es cierto es que cada vez son menos y menos legibles, porque cada vez uno más y más una letra con otra, como si las palabras enlazadas me dieran mayor tranquilidad. Quizás en el momento no lo vemos, pero pasado el tiempo, lo que escribimos adquiere tintes de distintos “yo” dejados por otro. Ese otro que alguna vez fuimos y que jamás volveremos a ser. Porque como lo dijo Virginia Woolf: "El diario es tan privado y tan instintivo que incluso permite que otro yo se desgaje del yo que escribe, que se separe y observe al primero cuando escribe. El yo que escribe es un yo extraño; a veces nada le induce a escribir".

miércoles, 6 de marzo de 2013

Dicen que...

Dicen que al mal tiempo buena cara, que después de la tormenta siempre llega la calma, pero que al fin y al cabo las cosas nunca cambian. Que todo lo que sube baja, pero que agua que pasa no mueve molinos. También dicen que todo el mundo merece una segunda oportunidad, pero que segundas partes nunca fueron buenas; que quien tiene boca se equivoca y que rectificar es de sabios. Que querer es poder y hace más quien quiere que quien puede, pero que quien todo lo quiere todo lo pierde, además que de donde no hay no se puede sacar. Que quien no arriesga no gana, que quien sigue la consigue. Que no hay más ciego que el que no quiere ver, que a palabras ciegas oídos sordos pero que a buen entendedor pocas palabras. Que la confianza da asco. Que ya se sabe que las apariencias engañan y que no es oro todo lo que reluce. Que quien avisa no es traidor, que si te he visto no me acuerdo y que más vale solo que mal acompañado. Dicen.

martes, 1 de enero de 2013

Me he cansado de verte así.

Siempre estás sonriendo a través del dolor, sonriendo porque no puedes soportar que otros se preocupen por ti. Siempre muestras esa mascara que esconde tu soledad, porque sabes que la gente prefiere escuchar el sonido alegre de una de tus carcajadas en lugar de sollozos desgarradores. Almacenas en tu corazón toda la ira, el dolor, y la frustración, ¡En cualquier momento estallarás en mil pedazos!. Eres aquella que en el espejo solo ve imperfecciones, manchas. Aquella que no ve lo hermosa que es su sonrisa, solo ve burlas y miradas que no existen. Eres aquella la cual su único deseo es ser una de esas chicas que parecen ser de porcelana, que para los medios de comunicación, ellas son "perfectas". Te guardas todo para ti, por miedo a que el resto piense que eres ridícula por esos sentimientos tan hermosos que redactas cuando escribes como te sientes, ¿no te cansaste de llorar noches enteras pequeño corazón?, tus ojos no soportan más lágrimas.
Pero hay algo que he querido decirte, eres excepcional, no sabes lo afortunada que deberías sentirte por ser quien eres, date la oportunidad de ser feliz porque al final, algún día te darás cuenta de que uno mismo es la única cosa que vale la pena. El espejo puede mentir, no te muestra lo que hay en tu interior.
Por favor, sé feliz.